Marcos Mundstock: ¿Qué le pasa?... Lo noto raro, con cara de preocupado, ¿qué le pasa?
Daniel Rabinovich: No, no, preocupado no estoy, pero estoy... estoy mal. Estoy nervioso, estoy ansioso, no sé... hace semanas que ando así.
Marcos Mundstock: Sí, se le nota, la verdad... No sé, me ofrezco a darle una mano, si quiere, yo soy psicólogo diplomado.
Daniel Rabinovich: ¿Usted es psicólogo diplomado? No sabía, tantos años que lo conozco...
Marcos Mundstock: Sí, lo que pasa es que no ejerzo.
Daniel Rabinovich: Ah, por eso...
Marcos Mundstock: Claro... Es como usted, que mucha gente no sabe que es neurótico... Y usted sí que ejerce.
Daniel Rabinovich: Muchas gracias... qué amable.
Marcos Mundstock: No, por favor... No, si quiere le puedo dar algunas sesiones de terapia.
Daniel Rabinovich: ¡Bueno! Probar no cuesta nada...
Marcos Mundstock: Bueno, "nada"...
Daniel Rabinovich: ¿Cómo "nada"?
Marcos Mundstock: Están mis honorarios.
Daniel Rabinovich: ¡No me diga que me va a cobrar honorarios!... ¿Y los años de amistad que tenemos?
Marcos Mundstock: No, eso no se lo voy a cobrar.
Daniel Rabinovich: ¿Y cuánto me va a cobrar?
Marcos Mundstock: Bueno, no, no se puede saber... hay que hacer primero unas sesiones de diagnóstico, como para ver más o menos en qué estado se encuentra, y después le paso presupuesto.
Daniel Rabinovich: ¿Presupuesto?
Marcos Mundstock: ¡Claro! Hay que ver el tiempo que me va a llevar, la mano de obra, los repuestos... Ya no se consiguen, pero... buscaríamos.
Daniel Rabinovich: Bue...
Marcos Mundstock: Si quiere, podemos empezar ya, eh.
Daniel Rabinovich: Bueno... Mal no me va a hacer.
Marcos Mundstock: No sé... Eh... vamos a hacer terapia cara a cara, recuéstese en el diván.
Daniel Rabinovich: ¿No me dijo cara a cara?
Marcos Mundstock: Ah, no, no... Cara, cara... muy cara.
Daniel Rabinovich: Ah... muy cara.
Marcos Mundstock: Usted sabe que la escuela psicoanalítica a la cual yo pertenezco tiene una máxima, un lema, que es: Es importante que el paciente se recueste...
Daniel Rabinovich: Bueno...
Marcos Mundstock: ... y que el tratamiento le re-cueste.
Daniel Rabinovich: Me re-cuesto entonces... ¿Así está bien?
Marcos Mundstock: Sí, sí. De cualquier manera no tiene importancia... es una sesión de terapia, no de fotos... Bue, ¿qué le anda pasando?
Daniel Rabinovich: ¡Qué sé yo! Tengo una serie de problemas...
Marcos Mundstock: Una serie... ¿cuántos?
Daniel Rabinovich: Una serie... ¿qué sé yo? Tres, cuatro problemas. No es una "serie" de problemas... Una... ¿miniserie? Una de las cosas que más me preocupan es una tesis que me encargaron sobre Johann Sebastian Mastropiero: "Influencia de la semiología estructuralista musicológica en las obras de Mastropiero". Le digo la verdad... no sé por dónde empezar.
Marcos Mundstock: Y... por ejemplo, la autobiografía de Mastropiero, el libro de memorias... ¿lo conoce?
Daniel Rabinovich: Lo conozco, pero no de memoria.
Marcos Mundstock: No, no, digo el libro que escribió Mastropiero de memorias.
Daniel Rabinovich: Y seguro que lo escribió de memoria, no se lo iban a dictar... no se lo iba a copiar.
Marcos Mundstock: ¿Ah, no? ¡Se lo copió íntegro!
Daniel Rabinovich: ¿Cómo se lo...?
Marcos Mundstock: Las memorias de Mastropiero se las copió íntegras de la autobiografía de otro compositor, de Günther Frager. ¿Y sabe cómo se dieron cuenta?... porque se olvidó de suprimir el capítulo "Mastropiero es un miserable"... Bueno, y por el título también.
Daniel Rabinovich: ¿Cuál es?
Marcos Mundstock: "Mi nombre es Mastropiero... como que me llamo Günther".
Daniel Rabinovich: Es que cuantos más libros de Mastropiero (o sobre él) leo, menos sé por dónde empezar.
Marcos Mundstock: Y... por ejemplo, a ver... ¿alguna obra de él que le haya impresionado especialmente?
Daniel Rabinovich: A mí hay una que me encanta, que es una opereta medieval: "El cruzado, el arcángel y la arpía".
Marcos Mundstock: Ah... sí, sí...
Daniel Rabinovich: Es buenísima, eh... trata de la batalla final por la posesión de la ciudad de Jerusalén.
Marcos Mundstock: Sí, sí... la conozco, la conozco.
Daniel Rabinovich: ... entre los turcos, comandados por el poderoso sultán Saladino... y los cruzados de Occidente, al mando del caballero Christophe de Cotillón... ¿la conoce?
Marcos Mundstock: No, no la conozco.
(Continúa en "El cruzado, el arcángel y la arpía")
Transcripción realizada por: Victoria Garcia
exelente blog gracias
ResponderEliminar